Américo Sánchez Meran (Meco)

Meco

Desde muy pequeño ha vivido con la familia Paniagua, primeramente con Don Bartolo Paniagua, luego con don Jorge Paniagua y finalmente pasó a vivir donde Don Ernesto Paniagua y su familia, donde todavía permanece desde hace mas o menos 30 años.

Primeramente vivía en la finca de Monte Bonito, propiedad de Ernesto, pasó a Marcelino a otra finca, aquí le hicieron su casita y actualmente vive en otra casita de su propiedad regalada por Don Ernesto y remodelada por Batanea en las cercanías de Buena Vista.

Américo sufre de una especie de locura la cual se manifiesta peleando con todo el mundo, pero en especial con Cléber Paniagua a quien le tiene una gran animadversión. También le coge su trastorno mental con enamorarse solo de todas las mujeres. Siempre se está casando con alguien pero encuentra un pretexto para no hacerlo. Su ardiente deseo es “engancharse” a la policía, pero no lo hace porque las personas que lo quieren no aceptan eso según él.

No quiere vivir en el pueblo por nada, aunque se le ha rogado, especialmente en tiempo de ciclones cuando se pone peligroso los lugares donde él vive (lo han sacado y por eso no se ha muerto).

Una vez se llevó una loca de Guayabal para la casita y estuvo tres días con ella bañándola y cocinándole y a los tres días fue el marido de la loca a buscarla y lo dejaron “sin pito y sin flauta”.

Donde actualmente vive hay un balneario donde en Semana Santa y en tiempos de calor acude mucha gente a bañarse y le siempre le dan su peso (o le dan algo), y él muy agradecido siempre le trae algo a Percida.